IÁÑEZ PICAZO, JAVIER
Entretenimiento para incendios nos fragmenta y nos reparte por toda esa escenificación de la pérdida donde el amor y el consumo son indistinguibles: en los huecos libres de todos los aparcamientos del mundo, en la negrura insomne que persiste tras los créditos finales de cada película, en el tintineo de una bombilla fundida, en el pelo rígido y opaco de los cuerpos ahogados en piscinas; es decir, en todas aquellas salidas de emergencia que nunca han sido abiertas.
En un presente donde la tristeza y la ironía se funden, donde las nuevas tecnologías y los paisajes postindustriales nos recuerdan la cara (no tan) oculta de las nuevas sociedades de consumo, donde no sólo el deseo, sino la muerte y el dolor se ven redefinidos en una nueva administración del duelo que tiene lugar en espacios liminales como gasolineras, piscinas, ascensores, agencias de viajes, centros comerciales, parkings, historiales de navegación, vías de servicio, salas de espera y otros síntomas modernos, Javier Iáñez Picazo es consciente de que si la muerte nos devolviese la mirada descubriría que tan sólo somos entretenimi