MARTÍNEZ FERNÁNDEZ, JOSÉ ENRIQUE
La obra lírica de Antonio Colinas que se estudia en el presente volumen ofrece variadas aristas que aúnan verdad, emoción y poesía en un camino que conduce de una poética de la armonía a una poética de la mansedumbre, según denominaciones del poeta. Aquella tuvo su momento cimero con Sepulcro en Tarquinia, (1975), poemario de intensa armonía y equilibrada belleza caracterizada por el lirismo, la intensidad, la emoción y la pulcritud formal. Más adelante, Noche más allá de la noche (1982) poetizaría, con encendido lirismo, temas esenciales, como el hombre y su destino, los momentos luminosos de la historia o las dualidades que agreden la existencia. La poética de la armonía de los libros anteriores fue cediendo paso a una poética de la mansedumbre entendida como estado al que se llega con esfuerzo tras la prueba del dolor, dando lugar a obras como Libro de la mansedumbre (1997) y Tiempo y abismo (2002), que aportaban clarificación expresiva y ampliación temática en relación con el decurso histórico e ideológico del momento, aunque siempre con un sentido de universalización. En 2011 publicó Colinas su Obra poética completa (1967-2010), a la que han de sumarse dos poemarios posteriores, Canciones para una música silente (2014) y En los prados sembrados de ojos (2020), destacando en el conjunto la potencia simbólica, el afán de conocimiento trascendente y la aspiración a la unidad y la plenitud del hombre en la armonía del cosmos.